Un tratado sobre el asesinato considerado como un hecho que permite el deleite artístico, a partir del análisis de algunos de los crímenes más famosos de nuestra historia, así como del estudio particular de los casos de Williams y MÆKean, dos asesinos múltiples de finales del siglo XVII y principios del XIX. Polémico, profundo y dueño de un conocimiento desbordante, el periodista británico Thomas de Quincey (1785-1859) desarrolla en «Del asesinato considerado como una de las bellas artes» uno de los textos más discutidos y perturbadores de la historia del pensamiento universal y, sin duda, el más reconocido de toda su producción. Admirado por figuras emblemáticas como Jorge Luis Borges, Charles Baudelaire o Edgar Allan Poe, postula una contradicción entre ética y estética al proponer que un crimen puede ser estudiado como una obra de arte. Según De Quincey, el asesinato constituye un arte que ha ido perfeccionándose desde Caín y, como tal, puede ser objeto de un goce estético.